El trágico ataque a las Torres Gemelas sirvió, entre otras cosas, para unir al pueblo americano detrás del presidente Bush en la defensa de este país. Este apoyo facilitó su reelección. Ahora muchos piensan que la muerte de Bin Laden hará lo mismo para Obama. La noticia de la muerte del terrorista parece que va ayudar a la campaña de Obama para el 2012, más aún si toma en cuenta que con la muerte de Bin Laden, la misión principal en Afganistán ha sido cumplida, lo cual sugiere el regreso de la mayoría de las tropas americanas a corto plazo.
Lo que aparentemente se ha quedado fuera del tintero es la contribución que hizo el ex presidente Bush en este asunto. La administración previa creó la infraestructura que hizo posible lo que sucedió en estos días. Aunque Bin Laden no fue capturado durante los ocho años de Bush, tampoco podemos decir que hubo actos terroristas de la magnitud del 9-11 durante ese tiempo. Bush tuvo que empezar su lucha en punto cero. Obama tuvo el beneficio de actuar de acuerdo con lo que la administración anterior había aprendido. Nadie pretende restarle mérito a lo que Obama logró. Solo aclarar que otros también contribuyeron.
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