lunes, 28 de febrero de 2011

La seguridad no marcará la reunión Calderón-Obama, afirman funcionarios


México.- Los gobiernos de México y Estados Unidosdefendieron la reunión que sostendrán el próximo jueves los presidentes de ambos países, al afirmar que el encuentro no se producirá en “un ambiente de crisis” ni estará marcado únicamente por el tema de laseguridad.

El mexicano Felipe Calderón y el estadounidense Barack Obama se reunirán en la Casa Blanca, unos días después de que se tensaran las relaciones entre los dos gobiernos por el ataque contra dos agentes estadounidenses en territorio mexicano por parte del grupo delictivo deLos Zetas.

También se encontrarán luego de las afirmaciones de Calderón en el sentido de que la cooperación de Washington en la lucha contra el crimen organizado resulta insuficiente.

Por la mañana, en un foro en la Universidad George Washington, el embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhán, afirmó que “la agenda bilateral es mucho más amplia que la seguridad”, reportó la agencia Notimex.

“Evidentemente, la seguridad está en el corazón de la agenda bilateral, pero hay muchísimos otros temas en la agenda que discutirán los presidentes” en su encuentro del jueves, agregó el diplomático, de acuerdo con Notimex.

La reunión del jueves será la quinta que sostengan ambos mandatarios en el tiempo que han coincidido sus respectivos mandatos. Calderón asumió el poder en diciembre de 2006, y Obama, en enero de 2009.

Por la tarde, la subsecretaria de Estado adjunta para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, negó que el encuentro vaya a efectuarse en “un ambiente de crisis” derivado del ataque contra los agentes estadounidenses o de los dichos de Calderón, indicó la agencia EFE.

“Están ocurriendo muchas cosas y hay mucho de qué hablar, pero no es un ambiente de crisis”, afirmó Jacobson, quien sostuvo que la reunión ya estaba planeada, según EFE.

Tras el ataque contra los agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), en el cual uno murió y el otro resultó herido, el gobierno de Estados Unidos exigió encontrar a los responsables y ofreció su ayuda a México.

Hasta ahora, las autoridades mexicanas han detenido a los dos presuntos líderes de la célula de Los Zetas que perpetró el crimen:Julián Zapata Espinoza, El Piolín, y Sergio Mora Cortés, El Toto.

Días después de la agresión contra los agentes, Calderón dijo en una entrevista que la cooperación de Washington en la lucha contra el crimen organizado es insuficiente.

La secretaria de Seguridad Interior estadounidense, Janet Napolitano, declaró estar desilusionada por esos señalamientos, aunque aclaró que la colaboración bilateral en la materia continuará.

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